"Si a mi me preguntan"

De Eudomar Rivera

Hola. Hoy doy inicio a mi nueva columna "Si a mi me preguntan" que por ahora sera exclusiva de este blog, la columna verbatum seguirá como siempre por la Agencia Carabobeña de Noticias los días jueves.
"Si a mi me preguntan" es algo personal. Encuentro las redes sociales muy amistosas pero en este caso, para mi que me gusta darle la vuelta completa al asunto, me quedo un poco corto y es por ello que seguramente continuaré mis escritos en las redes sociales.
Mi primer material sera siempre para el blog; sin mas preambulo y agradeciendo tu lectura y comentarios aqui les dejo "Si a mi me Preguntan!".

"Apoyas a l@s enfermer@s en su huelga de Hambre"
Las razones por las que la mayoría de las venezolanas y los venezolanos estamos pendientes de los profesionales de la enfermería y por ende de la medicina, es obvio, es la espera de una respuesta de parte del gobierno bolivariano. Esta respuesta tan esperada se espera sea favor de los huelguistas. Miles de twitter se escriben a diario en solidaridad por estos seres humanos según veo, agotados física y emocionalmente por un trabajo exigente desde todo punto de vista, ellos exigen ser tomados en cuenta y que se haga justicia en lo que a sueldos y salarios se refiere. Un día solo por curiosidad, en un administrador de redes sociales coloque en el buscador las palabras claves que me dieran como resultado los comentarios que la gente escribía en su TL y me quedé pasmado por el volúmen de comentarios y re-twiteos al respecto, de hecho no me daa oportunidad de leerlos todos por la velocidad en que aparecían, indicando en ellos masivos comentarios a favor y muy pocos en contra. Si me permiten esta observación aunque por ahora no viene al caso ya que no pretendo medir fuerzas.

Me hizo recordar los últimos días de Franklin Brito, donde los gritos de auxilio por la red no se hacían esperar, solicitando intervención de la ONU y demás, muchos comentarios de angustia que pululaban por doquier en las redes sociales de mayor uso en Venezuela, al final como siempre el único interesado en la protesta realmente es quien la hace, sea por razones individuales o de su colectivo, el llevó su lucha a sus últimas consecuencias y al día siguiente como si nada la gente continuo con su vida (me incluyo).

Si a mi me preguntan ¿apoyas la huelga de hambre de l@s enfermer@s? yo diría que NO, porque seria lo honesto. Les doy mis razones: Mientras desayuno golosamente con un grupo de amigos, muchos ven el twitter en su teléfono y escriben 140 caracteres de apoyo a los huelguistas, mientras mordemos el doble de ese número en calorías en nuestro suntuoso desayuno.
Mordisco a mordisco el tema gira sobre la huelga de hambre y la "miserable ministra que no hace nada", y de la responsabilidad del gobierno si esa gente se muere!!, mientras escucho con vergüenza, muerdo por segunda vez mi arepa y en silencio tomo un sorbo de un espumoso café con leche, apenas intervengo con una pregunta ¿y nosotros que estamos haciendo? ¿creo que ya sabes querido lector por donde voy?, cómo se puede llamar apoyo a cualquier iniciativa de huelga de hambre mientras ingieres el doble de calorías necesarias para subsistir, sentado cómodamente en una Arepera o en una Panadería y desde allí esperar resultados?, el silencio fue corto porque enseguida me sacaron una lista de las marchas en que participaron, en los movimientos que militan y por demás, yo escuche argumentos pero mi mente estaba en otro lado no me podía imaginar a estos amigos dejando siquiera de desayunar por el bien de ellos mismos mucho menos por el de otro o mas allá el de la patria. Sería demasiado sumarse a una huelga de hambre. Molesto mas conmigo mismo que con ellos, me quede en silencio, no había nada que pudiera decir, no en favor de los huelguistas sino en favor mio como su compatriota, o es que acaso ellos solos están viviendo con un sueldo de miseria en estos tiempos... educadores, médicos, obreros...el país entero debería estar seguramente en huelga de hambre.

La historia de Brito se puede repetir porque en realidad los enfermeros están solos; sus familiares y allegados son los que realmente tienen algo que perder, la mayoría de nosotros solo perderíamos horas de twitteo o ganaríamos mas horas para insultar al gobierno por no hacer nada y sin quierer ser profeta del desastre es casi seguro que las autoridades gubernamentales responsables no van a aflojar y si lo hacen, marcarían un nuevo precedente y la semana entrante los gremios, que por lo visto hoy si están conformes con su salario, pasaran a no estarlo y pasarían a instalarse en cuanta embajada o ministerio, a hacer huelga de hambre. Realmente no creo que el gobierno se de ese lujo en este momento político tan crucial.

Vivimos y nos quejamos de todo, o de casi todo, mas o menos hasta los viernes, y si hay feriado largo hasta el jueves. Los mas aguerridos maldicen desde la playa los servicios y la mediocridad del gobierno. No puedo borrar de mi mente las palabras de Chavez cuando los famosos cacerolazos, el decía que la oligarquía ponía el CD con ruidos de ollas mientras tomaban Whisky, yo hoy creo que ese termino de Oligarca o Escuálido no define a una clase social, define un comportamiento cómodo de algunos venezolanos, que si a los resultados me apego, puedo decir que somos bastantes los que ni lavamos ni prestamos la batea, como se dice en buen criollo.

Y así somos con todo: con las marchas, los que van a tirar físico en las elecciones, los que pasan meses hablando y hablando e incluso haciendo campaña y el día de votar se van a la playa, para luego de regreso como quien quiere ganarse la lotería sin comprar el billete, vienen a ligar que su candidato gane y a gritar FRAUDE! si no sale favorecido... y así pare de contar. Yo se que gente comprometida me dirá que ellos están haciendo y si eso es verdad, me alegra y mucho!! al final cada uno de nosotros le rendirá cuentas a la patria de lo que hizo o dejo de hacer; eso queda en la conciencia de cada quien, yo no voy a mentir yo no estoy apoyando nada, yo como la gran mayoría no estoy haciendo nada, porque apoyarlos seria ir hasta allá y sumarme a la huelga, es decir, salir de nuestra incomoda comodidad.

@eudomarr